La experticia en el control migratorio alertó a una oficial apostada en el complejo fronterizo Chacalluta, principal puerta de entrada del norte del país y por donde diariamente ingresan cientos de extranjeros, respecto a un sujeto, de nacionalidad colombiana, que intentó ingresar por dicho lugar.

El individuo, quien era acompañado por una mujer, pretendía -según manifestó a la oficial contralor- seguir viaje hasta Santiago. Sin embargo, el no tener claridad de sus reales intenciones de su visita a Chile llamó la atención, pues no sabía cuál era el tiempo real que pretendía estar en el país.

Ello motivó a que la oficial, gracias a su formación investigativa, decidiera indagar más respecto a la persona a quien se encontraba controlando. Fue así que, de acuerdo a los datos del individuo y aprovechando los recursos técnicos a su alcance, se encontró con que no se trataba de un simple turista, sino que más bien de un sujeto considerado como el administrador de una banda delincuencial , encargado de administrar y comercializar estupefacientes en la ciudad de Villavicencio en Colombia, quien el 2014 había sido detenido junto a otras siete personas, por ser parte de una organización criminal denominada la “Olla del Popular”, nombre designado por el sector en donde se dedicaban a cometer los ilícitos.

Recientemente el sujeto había salido de la cárcel y decidió, junto a su actual pareja, quien tuvo residencia en nuestro país pero que se encontraba vencida,  dirigirse a Chile con fines turísticos, según expresó.

La prohibición de entrada fue conforme a la Ley de Extranjería de nuestro país que faculta a la Policía de Investigaciones de Chile impedir la entrada al país de personas que hayan sido condenadas en su país por delitos.