Fiscalizadores del Servicio Nacional de Aduanas interceptaron un auto ecuatoriano con 23 kilos 275 gramos de marihuana. La droga estaba escondida en el piso y en el estanque de combustible y su valor supera los $116 millones en el mercado ilícito.
El procedimiento se registró en la zona primaria del complejo fronterizo Chacalluta cuando el can detector “Eddy” alertó a su guía sobre la presencia de un contrabando. Tras lo anterior, los aduaneros entrevistaron al conductor que viajaba con su esposa y dos hijos de 2 y 15 años de edad.
El vehículo fue derivado hasta un pozo de inspección y mediante el uso de fibroscopios se detectó la presencia de paquetes ocultos en el piso del móvil, razón por la cual se intervino toda la estructura utilizando herramientas de corte y tecnología no invasiva para detectar otros escondites. Fue así como se hallaron 24 tubos de pvc en el piso del auto y otros 14 cilindros al interior del estanque, los cuales en su interior contenían 23 kilos 275 gramos de cannabis sativa.
Los hechos fueron informados a la fiscal Claudia Toledo Ramos, quien instruyó la custodia de los involucrados y la droga a la policía de turno.
El conductor es profesor de computación, tiene de 36 años de edad y su nacionalidad es ecuatoriana. Fue contactado por narcotraficantes que se enteraron que viajaría con sus hijos a dejar a su esposa a Argentina con motivo de la realización de un magister. Salió desde Guayaquil y después de cruzar todo el Perú pretendía ingresar a Chile por Chacalluta y llegar hasta Santiago.
El control de detención del profesor se realizó en el Juzgado de Garantía de Arica y quedó en prisión preventiva durante los 90 días que dure la investigación.