La Brigada Investigadora de Delitos contra el Medio Ambiente y Patrimonio Cultural (Bidema) de la PDI, se encuentra a la espera de los resultados de un estudio encargado por el Consejo de Monumentos Nacionales, relacionado con la autenticidad de las pictografías de las Cuevas de Anzota, formación natural ubicada al sur de Arica.
El estudio busca aclarar si los dibujos del lugar (camélidos y cerámicas) tienen o no un fechado antiguo, antecedente clave para establecer la existencia de daño a sitio arqueológico como consecuencia de rayados presentes en el lugar.
La semana pasada los detectives acompañaron al sector a representantes del CMN, arqueólogos y expertos del Laboratorio de Análisis e Investigaciones Arqueométricas de la Universidad de Tarapacá, quienes realizaron mediciones y observaciones de las supuestas figuras patrimoniales dañadas por la acción de terceros.
Entre otras cosas, los arqueometristas esperan hallar abundancia de hierro limpio en los dibujos y códigos de colores coincidentes con los de pinturas rupestres reales del norte chileno, para determinar la autenticidad de las pictografías.
A principios de marzo se conoció sobre una denuncia por redes sociales relacionada con un supuesto daño patrimonial a los dibujos de Anzota provocado por grafiteros, sin embargo, el lugar no cuenta con la categoría de sitio protegido del CMN.