En la misma línea, el jefe comunal señaló que “en nuestra ciudad tenemos una comunidad boliviana permanentemente activa que aporta a nuestra economía, como los ariqueños aportamos a la economía boliviana. Frente a esto decimos que Arica sufre las consecuencia de cumplir con el Tratado de 1904 firmado por Chile y Bolivia”.
En relación a las externalidades provocadas por el Tratado de 1904, Espíndola mencionó que producto del tránsito de camiones bolivianos, los ariqueños y parinacotenses sufren contaminación antrópica por la basura y botellas con orina que son botadas en el Lago Chungará y el Parque Lauca; congestión vehicular y accidentes de tránsito en los valles de Arica y laexistencia de una línea férrea que divide dos poblaciones y dificulta los procesos de evacuación en caso de tsunami.
Que la atención se mantenga
Por su parte, el diputado Mirosevic, sostuvo que “a los ariqueños nos importa tener paz, prosperidad y desarrollo. Esperamos que después del fallo de La Haya, el país no se vuelva a desentender de Arica y no nos deje en una situación de desidia y lejanía. Por el contrario, esperamos que la misma atención que se ha puesto por La Haya se mantenga.
En el mismo sentido, el parlamentario, agregó que no quiere que se vuelva al típico centralismo que hemos sufrido históricamente, y que como región nos tiene con menor desarrollo que el resto. Por lo tanto, le estamos diciendo al Gobierno que no basta con defendernos en La Haya, mientras en Arica, nuestros adultos mayores siguen muriendo por falta de especialistas, o porque en Parinacota tenemos tres horas de electricidad, mientras en el lado boliviano tienen electricidad durante todo el día.
Importancia estratégica
Finalmente, Mirosevic sostuvo que hay que mantener el Plan Especial de Desarrollo de Zonas Extremas, PEDZE, y como este plan tiene que ver con la Ley de Presupuesto, esperamos que haya un aumento de recursos para Arica. Sin embargo hasta el momento hemos visto un interés por parte del Gobierno de disminuir ese presupuesto. Por ende, como ariqueños debemos patalear para que se reconozca la importancia estratégica que tiene nuestra ciudad.
