Durante su participación en el matinal “Mucho Gusto”, el jefe comunal volvió a criticar el rol pasivo de la Cancillería para abordar la crisis migratoria.
La nula presencia de Cancillería, la falta de recursos y el severo problema de las bandas de tratas de personas, fueron los principales tópicos que abordó el alcalde Gerardo Espíndola, durante participación en el panel del matinal “Mucho Gusto”.
Invitado al programa de Mega, el jefe comunal de Arica volvió a recalcar la falta de intervención por parte del actual Gobiernopara afrontar la crisis migratoria que afecta al norte grande, señalando que tal situación fue vaticinada ante el ex ministro del Interior, Andrés Chadwick, hace ya tres años atrás.
“El 2019 estuvimos con Vlado (Mirosevic) con el entonces ministro (Andrés) Chadwick, advirtiendo que acá se vendría una crisis migratoria brutal. Ya lo habíamos vivido en 2015 cuando empieza a generarse esta crisis donde comienzan a llegar profesionales, técnicos (…) y dijimos que acá iba a venir una crisis profunda, que hay que atacarla y abordarla de la mejor manera posible para ordenarla”.
Sin embargo, como es sabido al día de hoy, dicha advertencia no fue tomada en cuenta, provocándose el caos en las regiones de Arica y Parinacota, Tarapacá y Antofagasta, ante un desenfrenado ingreso de migrantes, un aumento considerable del tráfico de personas y de hechos de violencia con armas de fuego.
“Hoy tenemos una frontera que no está en manos del Estado, que está siendo tomada por bandas de traficantes de personas. Hay bandas, carteles y mafias que se están apoderando y disputando el territorio, están cometiendo crímenes que en Arica no se habían visto. No esperemos perder nuestra tranquilidad por esta situación que se vive en Arica”, manifestó.
Para Espíndola, parte de la culpa recae en el propio Presidente Sebastián Piñera, quien en febrero del 2019 llegó a la ciudad colombiana de Cúcuta para entregar ayuda humanitaria, oportunidad en la que señaló que “no hay nada más perverso que un régimen que niega la ayuda humanitaria a su propio pueblo”., refiriéndose al gobierno de Nicolás Maduro.
Para la máxima autoridad comunal de Arica, “creo que nos hemos portado súper mal con nuestros hermanos, con esta arrogancia permanente de un gobierno, especialmente este, que no quiere decir que Chile está en crisis, mostrándonos permanentemente como este oasis latinoamericano que, a la larga, se transforma en un espejismo y que harto mal nos ha hecho”.
Desde aquella visita, el número de migrantes venezolanos ha crecido exponencialmente, lo que derivó a la Municipalidad de Arica decretar en octubre pasado emergencia comunal migratoria, convirtiéndose de paso el único servicio de Chile en adoptar una medida de esta índole.
“Cuando el Presidente va a Cúcuta (…) fue un error garrafal porque llegó la gente a Arica con la bandera venezolana caminando por las calles, esperando que el pueblo chileno los recibiera con los brazos abiertos. Golpeaban la puerta de la Municipalidad pidiendo la casa, todos los beneficios que un coyote les inventó, pero además diciendo que el Presidente Piñera los invitó a venir”, señaló Espíndola.
Por tal motivo, para el alcalde existen dos aristas clave que el futuro gobierno de Gabriel Boric debiese trabajar desde el día uno: Informar sobre la realidad chilena al resto del continente y atacar a las mafias de tráfico de personas.
“Hay una tarea fundamental y es informar lo que es Chile al resto de los países. Hoy nosotros como Municipalidad hemos estado informando cuando teníamos un flujo de personas colombianas que, en Chile, las personas no iban a tener casa, no iban a recibir bonos ni una serie de cosas que inventan estos coyotes y estas mafias de traficantes”.
Y sentenció: “Hay que atacar estas mafias de tráfico de personas, aquí hay grupos en Chile que le convienen que ingresen personas sin sus documentos y de manera totalmente irregular. La trata de personas y el tráfico, se da en tres grandes espacios, la explotación sexual, la agrícola y el mundo de la construcción. Eso es esclavitud”.
