El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Arica condenó a Joaquín Alejandro Castillo Tello y Lincoln Cristhofer Jaime Becerra a 5 años y un día de presidio efectivo, en calidad de autores del delito consumado de robo con intimidación. Ilícito perpetrado en abril del año pasado en la ciudad.

En fallo dividido, el tribunal –integrado por los magistrados Fabiola Collao Contreras (presidenta), Rodrigo Cartes Pino (redactor) y Carlos Rojas Staub– aplicó, además, a Castillo Tello y Jaime Becerra las accesorias legales de inhabilitación absoluta perpetua para cargos y oficios públicos y derechos políticos y la inhabilitación absoluta para profesiones titulares durante el tiempo de las condenas.

El tribunal dio por acreditado, más allá de toda duda razonable, que aproximadamente a las 11:30 horas del 25 de abril de 2021, “en las inmediaciones del Terminal Internacional ubicado en Avenida Diego Portales, comuna de Arica,  los acusados JOAQUÍN ALEJANDRO CASTILLO TELLO y LINCOLN CRISTHOFER JAIME BECERRA, previamente concertados y con el fin de sustraer especies, abordaron como pasajeros el taxi colectivo (…), conducido por la víctima de iniciales H.I.M.L., solicitándole que  los trasladara hacia la población Raúl Silva Henríquez (ex 11 de Septiembre) de la misma ciudad. 

Luego en la intersección de Calle Óscar Bonilla con Avenida Argentina el acusado Lincoln Jaime Becerra inmovilizó a la víctima tomándola del cuello y punzándola un cuchillo en el mismo lugar. Por su parte, el acusado Joaquín Castillo Tello procedió a sustraer desde un compartimiento ubicado frente a la caja de cambios la suma de $22.000 en dinero efectivo. 

Acto seguido, una vez que la víctima logró zafarse y salir del vehículo, los acusados huyeron a pie del lugar con el dinero en su poder, huida que fue presenciada por personal de Carabineros que patrullaban el lugar, quienes persiguieron a los acusados por Avenida Argentina y les dieron alcance en calle Renato Roca, logrando recuperar el dinero sustraído a la víctima, en cual se encontraba en poder del acusado Joaquín Castillo Tello en el bolsillo izquierdo de su pantalón”.

Una vez que el fallo quede ejecutoriado, el tribunal dispuso que se proceda a la toma de muestras biológicas de los sentenciados para determinar sus respectivas  huellas genéticas e inclusión en el registro nacional de ADN de condenados.