El senador José Miguel Durana (UDI) valoró que la Corte Internacional de Justicia de La Haya estableciera que la demanda de Chile contra Bolivia, por el uso de las aguas del rio Silala, dejara en claro que durante el curso del proceso las partes llegaron al consenso de que estas aguas son un río internacional y que ambos países deben respetar el uso consuetudinario de sus aguas.

De esta manera, precisó que la posición inicial del ex presidente boliviano, Evo Morales, en orden a que dichas aguas correspondían a un Manantial, fueron dejadas sin efecto por sus propios representantes durante el curso del proceso, además de establecer que Bolivia no demandó y por ende, no corresponde una indemnización por el uso pasado de dichas aguas.

“Por esta razón, el país altiplánico no puede alterar el curso del Silala ni contaminar dichas aguas al mismo tiempo que debe informar a Chile de cualquier evento u obras de canalización que se encuentren en su territorio y que afecte sensiblemente a las mismas”, precisó el legislador.

Finalmente, Durana, dijo que al no pronunciarse la Corte de La Haya con respecto a la demanda y contrademanda, presentada por Chile y Bolivia, respectivamente, queda claramente establecido que se deben seguir generando los puntos de acuerdo y de encuentro para iniciar un camino de diálogo que pudiera permitir, en el corto tiempo, al alero de la negociación permanentemente que tendrá que existir por las aguas del Silala, reestablecer las relaciones diplomáticas.