Con sólo 23 años, Michelle Salas realizó su práctica profesional en la empresa Golden Omega, hizo una investigación en la compañía para su tesis, se sacó un 7 en la Universidad y gracias a su destacado desempeño fue contratada por la firma ariqueña. Como si no tuviera suficientes motivos para llenar de orgullo a sus cercanos, en su ex Liceo le pidieron que diera charlas motivacionales a los alumnos.

Cuando era niña, Michelle Salas no era particularmente matea en el colegio. Siempre le gustaron las Ciencias, pero no lucía en los primeros lugares de rendimiento de su curso y nadie le copiaba en las pruebas. Sin embrago, su paso por la Universidad de Tarapacá(UTA) abrió su apetito intelectual y se fue volviendo cada vez más especializada, alcanzando importantes logros académicos este 2024.

Tras finalizar sus estudios, y a sus cortos 23 años, Michelle realizódos prácticas profesionales en la empresa ariqueña Golden Omega, en las áreas de Aseguramiento de Calidad y Control de Calidad, donde participó de una investigación científica que luego presentó como tesis para titularse como químico laboratorista en la UTA.

En marzo recién pasado la joven presentó y defendió su trabajo de investigación titulado “Análisis de los procesos de destilación molecular en Golden Omega”, y le fue tan bien que se sacó un 7, logrando “distinción máxima”.

“Todo este proceso ha sido muy emocionante, soy la primera profesional de mi familia y todos en mi casa están muy contentos y muy orgullosos”, reconoce Michelle, la segunda de 5 hermanos. La científica vive en la población 11 de Septiembre de Arica junto a su madre que es dueña de casa, Alejandra, y a su padre que trabaja como vendedor, Miguel.

Como si no tuviera suficientes motivos para llenarse de orgullo, luego de su titulación Michelle fue contactada por un antiguo profesor de su liceo, el A5 Jovina Naranjo Fernández, para que diera charlas motivacionales a los alumnos de 3° y 4° medio.

“Fue una actividad muy bonita. Les explicaba a los estudiantes, desde mi experiencia, que también es importante estudiar desde el Liceo, no sólo esperar llegar a la Universidad para desplegar tu potencial”, detalla Michelle, quien recuerda que algunos docentes aún están sorprendidos con sus notables logros universitarios.

“Los profes le decían a los niños: ‘Si la Michelle pudo, cualquiera puede’. Ese más o menos era el mensaje”, bromea la profesional.

Gracias a su destacado desempeño, a comienzos de este mes Michelle fue contratada en Golden Omega, donde actualmente trabaja en Control de Calidad del Laboratorio. “Dentro de las industrias que hay en Arica, Golden Omega es la que tiene la mayor tecnología, los mejores equipamientos, y sus profesionales saben mucho. Es un enorme orgullo poder formar parte de este equipo”, reflexiona Michelle.